MARINA GALLARDO

 

ENTREVISTA A MARINA GALLARDO

 

  "Me obsesionan mis canciones"   

 

La artista portuense participa este jueves en el festival Primavera Sound como una de las grandes sorpresas del año · "Hay que aprender a vivir entre monstruos", afirma

 

Con dos discos indispensables a sus espaldas, Marina Gallardo se ha convertido en unas de las artistas más genuinas e imprevisibles del panorama independiente español. Rodeada por una cohorte de referencias literarias y filosóficas ha conseguido generar un universo propio que la ha llevado a actuar en la presente edición del Primavera Sound. Hablamos con ella de monstruos obsesivos y música, del pasado y de lo que se le viene encima tras publicar con Foehn Records esa maravilla titulada Some Monsters Die And Others Return.

¿Qué supone para tocar en un festival como el Primavera Sound?

Siempre he sido muy seguidora del Primavera Sound, a pesar de no haber podido ir nunca, y creo que para todo músico independiente es el festival más preciado. Es un placer poder tocar en el mismo escenario que Suicide o Animal Collective, además de poder ver a artistas que ahora mismo admiro mucho, como Kurt Vile.

Hace sólo tres años que sacó Working To Speak, pero escuchando lo que hace actualmente parece que ha pasado una década.

No me siento cómoda haciendo siempre lo mismo, me gusta experimentar y sacar lo que tengo dentro en el momento. Es una mirada introspectiva, y, como todo, esa mirada va cambiando con el tiempo. No reflexiono sobre lo que hago, o trato de hacerlo lo menos posible; pero me obsesionan mis canciones. Cuando no sueño con ellas me impiden coger el sueño, pero a la vez me hacen feliz.

Su música está rodeada por una forma de entender la realidad: ¿qué son exactamente los monstruos?, ¿qué sucede con los que vuelven?

Sucede que, como dice Michaux, hay que aprender a vivir entre ellos. Los monstruos tienen muchas caras, y la mayoría son abstractas. Pueden ser muchas cosas, desde el miedo más primario a la muerte hasta la oscuridad que reside en el interior de cada uno. En mi caso, convivo con muchas luchas internas y trato de mejorar como persona. A veces, en esa lucha, consigues ganar a los monstruos, pero cuando crees que has acabado con ellos a veces vuelven y te hacen sufrir. Supongo que la vida es eso, una tensión continua.

Artaud, Michaux… Sus referencias son muy poco usuales en la música que se hace en este país. ¿Adopta esa distancia con su entorno voluntariamente o es algo espontáneo?

Es algo que sencillamente sucede. Cuando vivía en Madrid descubrí a Artaud y supuso un antes y un después en mi vida. Lo mismo me ocurrió con Pizarnik. Sentía que las palabras, nuestro lenguaje ordinario y utilitario, no representaban mis experiencias. Llega un momento en el que te cuestionas absolutamente todo y a raíz de ahí empiezas a crear tu "mundo". Eso fue lo que me ocurrió, y estos artistas satisficieron la necesidad que tenía de responder a muchas cuestiones que me atormentaban.

Estos autores hablan del límite del mundo y de vivencias extremas. ¿Es capaz de concebir la música como algo meramente lúdico?

Por supuesto, pero a la vez considero que ese aspecto lúdico de la música se incluye igualmente dentro de esa vivencia existencial. Para mí no hay diferencia. El hombre tiene que jugar, es necesario y esencial para él, y no sólo cuando es pequeño. Como decía Ortega, el hombre necesita "dis-traerse". La música consigue eso, meterte en un extraño limbo que te hace salir de ti.

Otra cosa que llama la atención en su carrera es el progresivo perfeccionamiento del sonido en directo. ¿Cuánto hay de su banda en este proyecto?

El progresivo perfeccionamiento del sonido tiene que ver con mi evolución natural como artista. Escucho música muy diversa, también experimental, y esto se ha ido notando cada vez más. Lo mismo escucho a Can que a Chopin, a Nina Simone que a Stravinsky. En lo que se refiere a mi banda, apenas hacen falta palabras entre nosotros. Se meten por completo en las canciones y dan lo que creen que es mejor para ellas. Todos escuchamos prácticamente la misma música, con lo cual todo fluye con una naturalidad brutal. Ellos no sólo son mi banda, son mis amigos, y me han apoyado muchísimo estos dos años.

¿Cómo sonará su tercer disco?

Sinceramente, veo un cambio fuerte. El directo ha influido mucho, y la seguridad que tengo en lo que hago, especialmente con la voz, también. He abierto puertas que no sé a dónde me llevarán.

 

 

Pablo Bernardo Caveda / El Puerto | Actualizado 26.05.2011 - Marina Gallardo, en su local de ensayo en Mairena del Aljarafe.

http://www.diariodejerez.es/article/ocio/985111/me/obsesionan/mis/canciones.html

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El Arte de Vivir el Flamenco © 2003
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